Nominado a Mejor proyecto de espacio de uso público
El Parque Esmeralda se ubica a los pies del monte de Copiapó en una de las últimas urbanizaciones periféricas del costado norte de la ciudad, muy próximo al límite con el desierto de Atacama. El predio en el cual se emplaza corresponde a un terreno largo y angosto de aprox. 300m de largo x 30m de ancho, el que enfrenta a la pendiente en su lado más extenso, presentando un desnivel de más de 20mts y un porcentaje de pendiente longitudinal de hasta un 12%.
El terreno originalmente correspondía a una pequeña quebrada interior la cual fue rellenada con escombros por más de 40 años, de esta forma el proyecto nace de la idea de transformar un vertedero en un área verde que fuera el corazón de todo el barrio.
La primera forma de aproximarse a una idea proyectual, correspondió a trabajar la idea de un OASIS urbano, un lugar verde en el desierto, en vista y considerando la extrema aridez de la región. De esta forma y como punta de lanza para el diseño, se trabajó la idea de una estrategia de perspectivas visuales verdes, se ubicaron estratégicamente bosquetes en la intersección visual de las calles con el parque, de esta manera cada vecino al salir de su vivienda, obtendría como remate visual de su pasaje un área vegetada en vez de la actual ruma de escombros, contribuyendo a mejorar la calidad de vida de los vecinos.
Las zonas entre bosquetes, fueron trabajadas como áreas intermedias de terrazas miradores al valle de Copiapó, adicionalmente, entre estos lugares se incorporan los programas más duros pero necesarios para el parque, como multicanchas, skatepark, anfiteatro, entre otros.
Consecuentemente, el parque se va componiendo en un delicado tejido entre zonas de alta cobertura vegetal, zonas intermedias de vegetación más baja y zonas programáticas más expuestas (con pavimentos).
El proceso de diseño, incorporó un importante trabajo con la comunidad local, lo cual participó en más de 4 talleres abiertos, convocando a más de 60 vecinas y vecinos en cada instancia.